España vivió en este siglo XVI de una cultura humanista, influenciada por personas como Erasmo de Rotterdam, que defendía una cierta tolerancia, a una cultura intolerante y represiva que tendrá su mayor concreción en el ideario del Concilio de Trento y en la labor de la Inquisición. La creación literaria estuvo fuertemente sujeta a la censura religiosa. La Inquisición se encargó de la represión y en 1559 el inquisidor general Valdés publicó el “Índice de libros prohibidos”. Prohibiendo muchas obras clave del siglo. Pese a ello,la cultura española vivió una verdadera época de apogeo. Un género típicamente hispano como la picaresca alcanzó su culmen con obras como El Lazarillo de Tormes, el Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán. Aunque El Quijote fue publicado a principios de la siguiente centuria, Miguel de Cervantes inició su labor literaria en el siglo XVI. Con respecto al arte , el Renacimiento español tiene una evolución muy compleja. Durante el siglo XV y principios del XVI